Observatorio taurino: Entre el Guadalquivir y el Guadalete

Por Álvaro R. Del Moral 

Morante ya firmó el último contrato de la temporada de su pretendida reaparición. Vuelve sin haberse ido del todo. Nada que no sepan a estas alturas: la clausura será en Sevilla por San Miguel y -dicen- podría llevar aparejada algún gesto especial. Pero de diciembre a septiembre puede llover mucho aún. O debería. No tardaremos demasiado en saberlo. 

Tampoco habrá que esperar mucho para confirmar los rumores que sitúan al diestro de La Puebla, abriendo su propia campaña, en el cartel estrella de la Feria del Caballo de Jerez. Las cosas se precipitaron hace una semana, en la corrida guadalupana a beneficio de las víctimas del sísmo de México. El diestro de La Puebla acudió vestido de artista de manual al embudo de Insurgentes y fue interpelado por una alcachofa indiscreta por la fecha de su reaparición. “Sevilla está muy cerca de Jerez”, fue la respuesta del genial diestro cigarrero. A partir de ahí, algunos ya dan por hecho que Morante estrenará esa campaña de arte y ensayo a orillas del Guadalete. 

¿Llevará por delante a su cuate Pepe Luis? ¿Acompañará a José Tomás en su primer bolo? ¿Lo hará en los demás? Todo es posible aún. A Morante se le vio saludar cordialmente a su compañero madrileño en el túnel de cuadrillas de la Monumental mexicana. Después compartió burladero, en amor y compaña, con su ex apoderado, el magnate azteca Alberto Bailleres con el que, eso es seguro, no había roto el vínculo de la cordial amistad que les unía y les une. Del apoderamiento, dicen, podría quedar algún hilo que también está por ver y confirmar.

TÍMIDO AVANCE DE LA CAMPAÑA BARATILLERA

Pero ya que hablamos de Sevilla, nos hacemos eco de las noticias que llegan del campo charro: los veedores de la empresa Pagés han reseñado una corrida de El Pilar; otra de Garcigrande y dos, ojo, de los hermanos Matilla. La lista completa no tardará en caer. También ha trascendido que habrá una ligerísima modificación del calendario. Una de las novilladas de abono podría pasar al prólogo de San Miguel. Poco más. La información, los rumores y los dimes y diretes se dispararán cuando pasen los Magos. Mientras tanto nos vamos animando con otras noticias de la parafernalia taurina que avanzan la temporada que está por venir. 

Una de ellas es la designación del novelista catalán Ildefonso Falcones como pregonero taurino. Santiago León, teniente de Hermano Mayor la Real Maestranza, ha vuelto a poner el listón muy alto al resto de las instituciones y estamentos de esta ciudad. La elección del autor de La catedral del mar es un acierto que, además, trasciende de las élites intelectuales en las que se podido mover en otras ocasiones este acto que supone el definitivo pistoletazo de salida a la campaña hispalense en la mañana de Resurrección.

VIGENCIA Y MEMORIA DE LA EDAD DE PLATA

El sector tiene que aprender a salir del armario en que le ha confinado la dictadura de lo políticamente correcto. Y el único camino para hacerlo es moverse con desenvoltura en el mundo, la sociedad y la cultura de hoy. El acto celebrado hace una semana en el Ateneo de Sevilla podría marcar el camino a seguir. Miguel Ángel Perera tiene razones para sentirse satisfecho de ese encuentro de artistas, deportistas e intelectuales -con Plácido Domingo a la cabeza- que actualizó el mensaje de la Generación del 27. Aquellos poetas, precisamente, tomarón espíritu de grupo literario al abrigo de la misma institución y catalizados, cuidado, por un matador de toros, Ignacio Sánchez Mejías. El espíritu del polifacético torero y el de toda la Edad de Plata revoloteó sobre el salón de actos de la Docta Casa: en la música escogida; en la inolvidable declamación de Juan Echanove… Enhorabuena y que se repita. 

Nos marchamos hasta dentro de una semana. Feliz Navidad.

Publicado enEl Correoweb