Una tarde de expectación que fue, como dice el dicho taurino, tarde de decepción.
Por Carlos Ilián.
Lluvia torrencial como aperitivo y lluvia igualmente torrencial en la primera parte del festejo dejaron el ruedo convertido en un barrizal y ese barro hacía juego con la mansedumbre de la corrida, o sea,casta embarrada. Sobre el barrizal se movieron a la huida, o entre derrotes, o medias embestidas los de Victoriano del Rio y los dos toros de Núñez del Cuvillo. Una corrida cinqueña y casi de seis en algún caso.
Con este género la terna anduvo muy por encima. Así Miguel Ángel Perera, que había trampeado en su ya casi inevitable patita escondida, lo evitó en el cuarto toro y se plantó muy de verdad especialmente en el toreo al natural. Con recursos de veterano pudo sacar provecho del manso en la querencia y allí, entre muletazo y muletazo, construyó una labor inteligente con gotas de efectismo como la arrucina de marras y las manoletinas . Pero lo conseguido en su laboriosa faena casi se convierte en un enorme disgusto, al borde del tercer aviso, fallando estrepitosamente con el acero. No cayó ese tercer clarinazo porque el palco se lo perdonó, ya pasado, de sobra, el tiempo.
Alejandro Talavante se ha encontrado un lote desesperante en su mansedumbre, tanto el de Cuvillo como el de Victoriano. En su primero recurrió al toreo en corto y poco a poco, dejando algunos muletazos con entidad al igual que su faena sobre la mano izquierda al quinto, con el sabor de su ya añeja tauromaquia, de la que todavía le permite estar en los carteles de lujo. Y añejo es también su poco acierto con la espada…
Ginés Marín dejó unas gotas de calidad en el inicio por bajo de su primera faena de muleta en la que se encontró un toro que embestía al paso, aplicando inteligentemente, la receta del unipase, la misma fórmula para dejar unos naturales muy ajustados y rematados al sexto. Con la de ayer llevamos doce corridas de toros y aún no se ha lidiado una corrida de premio. Toros sueltos de nota si, una corrida completa no.
Plaza de Madrid. Decimoquinta corrida. Casi lleno. Toros de Victoriano del Río y Núñez del Cuvillo (3), mansos en general y algunos de escasa presentación. Miguel Ángel Perera (5), de caldero y oro.Bajonazo y media estocada (silencio). Tres pinchazos y cinco descabellos. Dos avisos (silencio). Alejandro Talavante (5), de rosa pálido y oro. Dos pinchazos y descabello. Un aviso (silencio). Media estocada y descabello (silencio). Ginés Marín (5), de caldero y oro. Estocada trasera y tendida (silencio). Pinchazo y media estocada (silencio)
El cartel de hoy
Toros de El Pilar para Diego Urdiales, Pablo Aguado y Francisco de Manuel.
