SEÑORES, HICE LO QUE PUDE Y COMO PUDE!
Para mi aparte de cuestiones técnicas, lo más importante en la lidia, sean cuales sean los términos en que ésta se plantee, es el acento personal que en ella pone el lidiador. Es decir, el estilo. El estilo es también el torero. Se torea como se es. Esto es lo importante: que la íntima emoción traspase el juego de la lidia.
Juan Belmonte.
Por el Guerra.
SE TOREA COMO SE ES y el Zapata hace el toreo como él lo siente, así sean rápidas o de mal gusto sus maneras. Ayer ante el segundo toro de su lote de nombre Camarógrafo de la ganadería Jalisciense de San Marcos, propiedad del Arq. Ignacio García Villaseñor, el diestro tlaxcalteca se rencontro con el triunfo en este escenario y con la escasa afición que se congrego ayer en la plaza México. El toro permitió muchos pases y el Zapata decidido se los pego a toda velocidad. Fue una faena sin reposo pero intensa ante el desconcertado público, por no decir villamelonaje, que sufre desde hace algunos años al parecer los síntomas de la bipolaridad, ya que asi como pide un premio o aplauden a un torero le pitan con la misma facilidad y sin razon alguna. Media oreja había cortado ya el Zapata después de un tercio de banderillas espectacular, destacando un par en especial e invento dé el mismo parecido al par del violin. Fue con ese par de banderillas bautizado como el posible con que el Zapata estremeció a la concurrencia y por el cual le pidieron dar la vuelta al ruedo misma que dio garboso el matador. Después con la muleta realizo una faena riñonuda, muchos pases por aquí y otros tantos por allá le pego el Zapata a un toro que embestía y repetía pero sin clase ni emotividad, no era un toro fácil y no le podriamos exigir una faena 100% artistica y de reposo, pero una vez mas me queda claro que no todos los toreros nacen con buen gusto ni son capaces de conmover a las multitudes con su arte o formas de interpretar el toreo. La oreja fue un premio justo a su labor y no las dos que exigia una parte del publico.
El Fandi no tuvo suerte en su lote y fue silenciado mientras que Fabián Barba salio a jugarse la vida en su primero y demostrar nuevamente que quiere ser un torero importante pero tampoco su lote se prestó al lucimiento. Al final solo quedaron sus buenas intenciones y la indiferencia de un público que abandonaba la plaza sin saber que era exactamente lo que había ocurrido durante las casi tres horas en las que formaron parte del último espectáculo realmente democrático que hay en el mundo.
La corrida de la Familia Garcia Villaseñor y Garcia Vivanco fue una corrida bien presentada pero mala en general, todos los toros presentaron problemas y no permitieron el lucimiento a excepción del cuarto toro que se dejo un poco más. No hay que confundir la bravura con el genio y con otros factores que presentaron algunos toros como los lidiados en la undécima corrida de la temporada, factores que en pocas palabras no sirven pa’na y mucho menos pa’ triunfar.
Undécima Corrida de la temporada.
Mala entrada.
6 toros anunciados de San Marcos aunque solo se lidio uno de ese hierro, completaron el encierro 2 toros de la ganaderia San Mateo y 3 toros de San Lucas que al igual que el de San Marcos fueron malos para el toreo, con peligro y presentaron muchas dificultades.
El Zapata: silencio, oreja.
El Fandi: silencio en su lote.
Fabián Barba: palmas y silencio.