Por “PUNTILLERO“
En un mundo que se autonombra incluyente las corridas de toros al menos en Cataluña están proscritas. Sin embargo, pese al ambiente pesimista esto es quizá lo que había estado necesitando la Fiesta Brava durante hace ya unos años. Debate y revitalización. Donde muchos ven desastre, a un lado, esperando sentada a la vera del camino se encuentra el boleto de oro para el alivio del espectáculo.
Solo un motivo tan importante como lo ocurrido en Barcelona esta semana podría cambiar la mira de nuestro radar taurino de objetivo. Sí, este “Puntillero” tan partidario de El Pana y Fermín Rivera no hablará de tan interesantes festejos en Morelia y Orizaba. Ni de los toros de Vistahermosa, aún con ese 151 incluido que me gusta para que el potosino lo borde…
Pena porque éste fin de semana taurino, incluido las consecuencias del gran triunfo de Juan Pablo Sánchez en Las Ventas y la sospecha internacional confirmada con la caída de Macías en El Puerto, los temas taurinos de fondo pleno que se quedan en la agenda. Perdón.
No, en este día dejaremos de hablar de toros para seguir hablando de política taurina. Cosa que ha afectado el arraigo de la fiesta en tantos años. Lean o escuchen a la mayoría de los “cronistas” y para “grillar” son el habano perfecto, pero para hablar, chanelar, de toros ni a pitillo llegan.
Lamentos, pesar, malestar, pesimismo y mayor aliento a tonterías de refundar la fiesta que tienen ahora vuelo en medio de un ambiente de asnos en fiesta de toros, son los comentarios que anticipo escucharan en los espacios taurinos de fin de semana. Frases como “Revés a la fiesta” “De quién es la culpa” “Si ves las barbas de tu vecino cortar…” “La fiesta se debe modernizar” “Debemos buscar opciones en otros espectáculos” “Debemos aprender de…” “Su hubiera gente en Barcelona…” Y otras mediocridades que contiene el mejor diccionario de clichés en el mundo.
Claro para el cronista mediocre, el comentador de oficio, el taurino funcional, cazacarteles por antonomasia lo menos será intentar defender la tradición del toreo. Nada más equivocado. La fiesta de los toros no se discute, no se defiende, se explica. Aquí radica la ventaja de la prohibición. El efecto mediático que ha provocado en las mentes más pensantes de la blogosfera y las altas letras en el mundo ha sido de condena a prohibir. Una sociedad que se dice incluyente como la catalana no puede salir con esta simpleza.
Dejaré de lado las razones jurídicas por las que creo que para 2012 habrá corridas de toros en Barcelona, son varias y suficientes para tirar el acto de autoridad del Parlament. Diré que esta situación lejos de amenazar a la fiesta está siendo el detonante para darnos al fin cuenta que la fiesta tiene que ser tolerada. Si no te gusta no vas. La libertad por delante. Así las amenazas externas pasan de ser víctimas a victimarias, de progresistas a intolerantes, quedando el tanto por contestar en este lado de la cancha.
Por eso, si esta prohibición acaba siendo la liberación social de la fiesta, tiene que ser el revulsivo taurino de la calidad. La libertad por delante con la calidad por moneda. Y lo anticipo. Mientras el “Silencio de José Tomás” (Parece esto al título de un capítulo de un libro de Alameda) sigue determinando y mostrando la actitud pasiva que tanto ha lastimado al toreo, Enrique Ponce está tomando el liderazgo de los toreros.
No sé que esperan el “Flautista Incómodo” y el “Suegro Incomodísimo” que apoderan a cada uno respectivamente, para ponerlos juntos en Barcelona mano a mano, en cuanto José Tomás reaparezca. Así debemos de contestar, de explicar la fiesta a partir de la calidad, es decir con el Toro acuñado en la misma, con la edad y las astas intactas por favor.
La prohibición debemos verla como la liberación definitiva de los fantasmas antitaurinos y no creer las falacias ni a los sofistas de siempre ni a libros como el escrito por un ex ganadero y ex taurino tlaxcalteca avecindado en Tabasco donde impulsa a mochar la lidia. Es necesario cuestionarlo todo y reflexionar con inteligencia y torería, cosa que será a partir de ahora la directriz la recomendación que llamo seguir a los aficionados. No compremos más clichés.
No olvidemos que los políticos no pueden llevar a imponer el pensamiento, ni gustos o fobias a seguir a las sociedades. Les aseguro que Las Cortes o el Tribunal Constitucional Español brindará una sorpresa.
Aquí en Mx es imperativo que la Ley para la Celebración de Espectáculos Públicos en el DF cambie… más si Diego Ventura viene a la Plaza México. Imaginemos, soñemos que la empresa pudiera ofrecer el Mano a Mano, la regulación taurina… Qué creen? Qué Cruel!… Lo Prohíbe. Prohibido Prohibir. Si queremos regular correcta y adecuadamente el toreo cambiemos la Ley y veamos por fin un cartel que habrá de revivir la pasión taurina en el tendido… Por lo menos a Caballo… pues con los de a pie sería automático. Pero si está prohibido…