Por Luis Carvajal – De SOL y SOMBRA.
Lo que se presagiaba como un gran Domingo de toros terminó en una tediosa tarde en la Nuevo Progreso de Guadalajara, que registró una asistencia que rondó la mitad de su aforo.
En el papel un buen cartel de corte internacional con el francés Sebastián Castella, el español Ginés Marin y el mexicano Luis David Adame; lidiando toros de Villa Carmela desiguales en presencia que resultaron débiles y descastados en conjunto con excepción del 4to que mereció arrastre lento.
El primero de la tarde para Castella fue un toro con mucha cara pero escurrido de los cuartos traseros, que mostró debilidad desde su salida y embestía tirando algunos derrotes. A la mínima exigencia del frances, el toro perdía las manos lo que causó desesperación en el tendido. Señaló una estocada desprendida y fue silenciado.
Al cuarto de la tarde lo recibió con un saludo capotero alegre compuesto por algunas verónicas muy coreadas, soberbia fue la media y colocó al toro en el caballo con una vistosa y templada larga cordobesa. Superado el trámite de la suerte de varas, que ayer fue solo eso, un trámite breve con los de Villa Carmela, realizo un vistoso quite por chicuelinas. Inicio su faena como ya es habitual en su repertorio con un pendulo ajustado, cambiado por la espalda que firmó con un largo pase de pecho. Dos series templadas con la derecha y lo mejor vendría al natural cuajando muletazos muy largos y expresivos. El toro embistió con codicia y cuando parecía venirse arriba Sebastián decidió terminar su faena con unas dosantinas que fueron recriminadas por un sector de la afición que le insistía en que siguiera realizando el toreo fundamental. Todo se emborronó con el acero al señalar un pinchazo hondo y 3 golpes de descabello. Saludo una ovación y el toro que fue premiado con el arrastre lento.
El jerezano Gines Marin pasó de noche en Guadalajara. Con el 2do de la tarde tuvo algunos buenos momentos con el capote y al natural dejando un cambio de mano coreado por el público, pero su labor no estuvo a la altura de su primer astado y “Aficionado” se iría al destazadero entre aplausos. Con el 5to no pasó nada trascendente nuevamente y además se puso pesado con los aceros para ser silenciada su labor.
Luis David Adame se llevó el peor lote de la tarde. Con el 3ro poco pudo hacer debido a la poca fuerza y mansedumbre del de Villa Carmela. Pero con el cierra plaza logró más conexión con el público al instrumentar un enjundioso quite por zapopinas. Con la muleta la euforia bajó ya que no logró acoplarse a un toro que se quedaba corto en sus embestidas. Pero lo tedioso de su labor muleteril lo borró en la suerte suprema ya que dejó un estoconazo con efectos fulminantes, que fue suficiente para que el público sacara los pañuelos blancos y pudiera pasear la única oreja de la tarde.
El próximo Domingo se anuncia al español Antonio Ferrera junto a los mexicanos Octavio García “El Payo” y Diego Silveti con un encierro de La Estancia.