Por A. Baz.
El festejo de mañana (hoy) pone punto y final a la Feria de Fallas 2013. En las calles de Valencia el olor a pólvora precede a la «cremá». Pero antes, como epílogo a un fin de semana de fiesta, está la corrida de San José.
Con el permiso de Daniel Luque, Enrique Ponce y Morante de la Puebla, dos figurones del toreo frente a frente, pondrán el broche de oro al serial valenciano. Por dicha condición, ambos acostumbran los lugares de los elegidos. Los dos apuestan por la calidad antes que la cantidad.
Y ahí está Valencia, en el día de San José. Es la gran fecha. Enrique Ponce hará esta tarde del 19 su paseíllo número 23. El torero de Chiva es un fijo. Siempre ha estado ahí cuando Valencia lo ha necesitado. Y así lo demostró actuando dos tardes en las Fallas pasadas y una más en verano, cuando la baja de José María Manzanares hizo que fuera Ponce quien compitiera en mano a mano con el propio Morante.
El resultado, en aquella ocasión, el mismo: una oreja cada uno. La tarde era en la Feria de Julio; hoy es en Fallas. Los toros eran de Victoriano del Río, hoy de Juan Pedro Domecq. Fechas distintas y toros diferentes; pero un mismo fin: triunfar en el coso levantino.
El mismo objetivo que anhela Daniel Luque. No consiguió trofeo el San José pasado, pero sí se ganó al público a base de imponerse a las dificultades y carencias de su lote de Capea.
Ponce, Morante y Luque, tres matadores con argumentos para confirmar que lo acontecido hasta la fecha no ha sido más que el aperitivo hasta el gran festín final.