Por Cañaveralejo.
Todo transcurre tal y como estaba previsto: decepción tras decepción. Ahora, a toro no pasado todavía, es hora de buscar responsables.
Estamos en crisis, nos dirán, sin considerar que las épocas de crisis suelen ser épocas de oportunidades si se saben gestionar. Pero aquí nadie gestiona nada, ni maestrantes, ni empresarios, ni toreros, ni ganaderos… aquí sólo gestiona el público que ha decidido no acudir a la plaza, así es que, entre los de fuera y los de dentro nos acabamos cargando el invento.
Desde que los “cinco magníficos” decidieron no acudir, el tándem Canorea-Valencia se frotó las manos de alegría, y los hechos están dándoles la razón: Sevilla, feria, farolillos, medio aforo o poco más cubierto, y ellos ganando dinero a espuertas.
Les ha faltado imaginación o ganas para buscar alternativas a esa deserción y haber llenado la plaza. Es de una tristeza infinita ver esos tendidos por la mitad pero esa es la afición de Sevilla y no más.
Faltan los “cinco magníficos” que es lo que el gran público quiere ver, pero el gran público no es el aficionado, o sea, que como sabíamos, esto no lo mantiene la afición, lo mantiene el público que hubiera acudido en masa si se hubieran anunciado los citados, pero entonces el tándem aludido no hubiera ganado dinero.
Hay este año en Sevilla anunciados toreros interesantes pero sólo para verdaderos aficionados; por otra parte se ha perdido una oportunidad única para haber anunciado también ganaderías “nuevas”, también interesantes que nunca han estado en Sevilla; ya, de rematar la feria hagámoslo al completo, pero no, van las de siempre pero esta vez con ganado de saldo.
A los matadores anunciados se les “vendió” que iban a lidiar lo que lidian las figuras y que rara vez les toca a ellos, pero no está siendo lo mismo.
No hay más que ver lo que está saliendo por chiqueros en cuanto a presentación, trapío, bravura, encaste ( o “descaste”), etc. Lo dicho, los maestrantes a por el bocado del león, los empresarios a por lo que queda, los toreros las migajas ( el convenio y poco más) , la feria hundiéndose, pero no importa, aquí nadie toma medidas por lo que el próximo año todo será parecido a este. ¡ Ay, Sevilla!.
Vía: http://www.gentedigital.es/blogs/taurino/16/blog-post/11442/sevilla-y-su-feria-de-abril/