
Una cornada en el muslo derecho al novillero Joel Delgado se lleva, por avatares del destino, los titulares de una novillada en la que los aficionados han disfrutado dos estupendas faenas por parte de los novilleros José Zavala y José María Pastor, así como una más del becerrista Juan Pedro Llaguno, mismas que han valido una oreja para cada ejecutor taurino.

José Zavala mostró buenas maneras y se entonó con un novillo que como sus hermanos del encierro de la ganadería de Huixcazsha, resultó medido de fuerza y de bravura. En contraparte, cada ejemplar fue serio de presencia. Zavala habría tenido mayor trascendencia en su labor si toreara más reunido. Tras una estoca cortó una oreja.
Javier Castro se topó con un novillo que en varias ocasiones rodó por la arena por lo que a pesar de la voluntad de muchacho de Aguascalientes se retiró en silencio.
Arturo Soto tuvo los arrestos para hacer remontar una faene frente a un novillo descastado y débil. Se colocó en terrenos de cercanías para terminar una labor al alza muy cerca de tablas. No logró despachar al primer viaje con la espada por lo que escuchó un aviso. Desafortunadamente se dio una vuelta al ruedo por su cuenta que pocos asistentes le respetaron.
José María Pastor se hizo sentir a partir de un quite por gaoneras. Luego colocó banderillas con lucimiento. A pesar que este novillo se fue apagando el hidrocálido lo aprovecho en la muleta; primero con pasajes por ambos pitones y luego con recursos pintureros. Se tiró a matar en el momento justo para dejar media estocada y cosechar una oreja.
Arcadio Valenzuela, con buena planta y manejo de técnica, no tuvo en suerte un novillo cero emotivo pero tampoco él logró calentar el tendido con su actuación. Escuchó un aviso.
Joel Delgado sufrió una cornada en los primeros escarceos con la muleta, luego que el novillo ya había hecho amagos de prenderlo durante la colocación de banderillas. Del trance resultó con una cornada en la muslo derecho, con 12 cm. de longitud que pasó a pocos centímetros de la arteria femoral, no hubo lesión vascular.
El becerrista Juan Pedro Llaguno emocionó al público al recibir al eral de la ganadería de D’Llaguno con una serie de lances con clase. Pero este ejemplar resultó medido de fuerza y bravura por lo que no le facilitó la faena de muleta. El joven queretano se impuso con entrega, templanza y variedad en la muleta. Realizó un estoconazo y cortó una valiosa oreja.
FICHA DE FESTEJO
SÁBADO 21 DE JUNIO. Plaza de Toros Cinco Villas. Estado de México. Lleno.
SEIS NOVILLOS DE HUIXCAZDHA, bien presentados pero deslucidos en su juego. UN ERAL DE D’LLAGUNO, bien presentado pero de poco juego. PESOS: 400, 385, 380, 420, 390, 385 y el eral 300 kilos
JOSE ZAVALA: Oreja y palmas en el que mató por Delgado.
JAVIER CASTRO: Silencio.
ARTURO SOTO: Vuelta por su cuenta tras aviso.
JOSÉ MARÍA PASTOR: Oreja.
ARCADIO VALENZUELA: Silencio tras aviso.
JOEL DELGADO: Cornada en el muslo derecho.
JUAN PEDRO LLAGUNO (becerrista): Oreja.