Zacatecas: Días de feria en ¿Tierra de Toros?

No fue uno de esos inicios de feria esperanzadores, en los que la Monumental se engalana y abre sus puertas al gentío. No fueron tampoco los primeros festejos de estallido; más bien, fueron tardes de cielo encapotado, y tristonas por el mal juego de los toros.

Nada fue posible porque los toros no ofrecieron opciones, porque su poco físico no encerraba más que quintales de mansedumbre y vulgaridad. Solo un astado de Pozo Hondo el dia sabado destaco; el resto ni uno solo acudió ni a los caballos ni a los engaños con un mínimo de bravura.

Por Juan C. Valadez.

Zacatecas, Zac.- Dos días de feria que equivalen en el balance final a dos días de petardos y vicios al por mayor es lo que hemos padecido hasta el momento en la Monumental de Zacatecas.

La empresa “Tierra de Toros” sigue sin encontrar la fórmula para que regrese el público a los tendidos de la plazota y es que parece que “chango viejo no aprende maroma nueva”.

Con los precios de las entradas por la nubes y encierros con muy poco trapío la afición sigue dándole la espalda a la empresa. En los dos primeros festejos de la feria la plaza apenas ha registrado medias entradas, aun cuando se han presentado parte de lo mejor que tiene nuestra baraja nacional.

Pero vamos por partes.

El pasado domingo se lidiaron seis astados de la ganadería de Pozo Hondo, un encierro terciado, de juego desigual entre los que destacó el corrido en segundo lugar por su bravura.

Ante este bravo ejemplar El Zototoluco desgranó parte del gran oficio que atesora por algunos momentos, pero los años no pasan en balde y al final se le vio por debajo de las condiciones del bravo astado de Pozo Hondo.

Su segundo era un manso con embestidas informales y peligro sordo, un astado ideal para que el poderío y oficio del veterano quedará patente una vez mas, pero eso nunca paso.

Sin duda para muchos el atractivo del cartel era la alternativa el diestro local Luis Ignacio Escobedo, pero sucedió lo que otros nos esperábamos; la cronica de un fracaso anunciado.

Y es que Escobedo ha tenido una actuación que rayo en el ridículo y en la charlatanería. Lo adelantaron a la alternativa quizas no de una forma tan precipitada, porque llevaba ya algunos años de novillero, pero la realidad es que no tiene ningún fundamento, técnica, aptitud y conocimientos para caminar por las filas de los matadores con solvencia.

No se puede estar tan mal y aun así después de su penosa actuación salir con mucha “caradura” al tercio alentado por el grupo de “confundidores” que lo acompañan. El resto del poco público le pito su atrevimiento con justa razón.

Con su segundo que era un astado impresentable, pero con nobleza y cierta calidad pego cualquier cantidad de trapazos sin ton ni son. Mato finalmente como pudo y el juez le regaló una oreja, protestada por un sector, que sera para el recuerdo de una tarde que debería de ser de debut y …..

José Adame anduvo en su primero con algo de temple y reposo pero fiel a su costumbre, tambien algo rapidillo. En este toro su subalterno Héctor Rojas sufrió una cornada que cerca estuvo de ser mortal.

Sí bien Adame con su primero estuvo por momentos francamente bien y corto una oreja, con su segundo abuso del pico de su “muletota” y de las distancias. El de Pozo Hondo no presentaba muchas opciones de triunfo y José Adame alargó sin sentido su trasteo para finalmente irse en blanco.

Segunda Corrida

El día de ayer en el festejo del escapulario de plata el fraude al aficionado se hizo patente desde el sorteo. Se lidiaron seis astados de Los Encinos sosos, anovillados, flojos y exentos de bravura en sus venas.

Este tipo de situaciones son una de las razónes por las que afición no se para más por la Monumental. Extrañamente en cada festejo de los últimos tiempos en donde se ha suscitado alguna anomalía o escándalo aparecen acartelados siempre José Adame o El Payo.

Y mire que El Payo tiene calidad, ya que por momentos cuando rompe con la rigidez, torea con mucho sentimiento y proyección al tendido.

El problema es que generalmente lo hace con reses con poco trapio y eso desluce su quehacer.  Con su primero paso inedito, pero ante el manso bobalicon que salió en segundo lugar de su lote, tuvo momentos de mucha calidad, aunque fueron muy pocos realmente.

Recibió las dos orejas tras una estocada letal, un regalo innecesario del juez de plaza y la gente se las protesto al torero queretano.

José Adame era la gran atracción en los dos primeros carteles de la feria, pero su nombre sigue sin atraer público a las taquillas, ayer en el día más grande de la feria nuevamente se demostró que su poder de convocatoria es nulo y mas si consideramos que algunos le han colgado ya la categoría de figura del toreo.

Con un lote imposible Adame hizo un gran esfuerzo, pero sus fallos con la espada le impidieron tocar pelo. No conforme regalo un tercer “torito” de la ganadería de La Paz que le permitió hacer una faena en donde hubo de todo, reposo, temple y valor, pero también zapatillazos para provocar las embestidas (estilo Zototoluco) algo que viene haciendo este año con regularidad y muletazos a una velocidad récord. Tras dejar una estocada trasera y tendida sin una gran petición, el juez le dio una oreja.

Ha perdido Adame esa frescura de sus incicios y la alegría que proyectaba su toreo, aunque ha ganado en profundidad con la muleta, pero por momentos su toreo parece indefinido, como si estuviera atrapado entre lo artístico y lo eléctrico.

La pregunta es quien es realmente José Adame ¿Torero de arte, poderoso o bullidor? A mi me sigue pareciendo un torero interesante, pero todavia sin un sello propio.

Juan Pablo Sánchez con su primero se fue indedito, pero con su segundo hizo la faena de la tarde. Con el temple acostumbrado y las buenas maneras que atesora, aprovecho las embestidas lentas del mansito de Los Encinos y le instrumento las más sentidas tandas de la tarde. Una oreja de mucho peso se llevo Juan Pablo, que de verdad si el quisiera o el corazón de hielo se le derritíera un poco, acababa con el cuadro pero…

Abrió el festejo el rejoneador Emiliano Gamero con un astado de Rancho Seco y dio una vuelta al ruedo. Inexplicablemente regalo un astado también de Rancho Seco, algo poco usual en un rejoneador y se llevó una oreja.

Al final del festejo tras una extraña y populachera decisión, que dividió a los escasos aficionados que para ese momento quedaban en el tendido, El Payo se llevo el escapulario de plata y fue sacado en hombros por los “costaleros” de costumbre, no por el publico.

Así las cosas en Zacatecas, tierra supuestamente de toros….