
Por Luis Carvajal – De SOL y SOMBRA.
Cuarta y última corrida del serial de aniversario de la Plaza de Toros Nuevo Progreso 2019-2020. El francés Sebastián Castella bordó una emocionante faena al segundo de su lote de nombre “Barquero” marcado con el número 360 y con 510 kilos que fue indultado, el único toro rescatable de una mansada de Arroyo Zarco fueron pitados en el arrastre en su mayoría, resultando desiguales en su presentación y descastados en lineas líneas generales.
El primer espada de la tarde fue el tlaxcalteca Uriel Moreno “El Zapata” que intentó con su toreo efectista y poco ortodoxo agradar al respetable. Recibió al primero de la tarde por verónicas con un bonito remate soltando la punta del capote. Como ya es costumbre en su repertorio tomó los palos invitando a Leo Valadez a cubrir el segundo tercio siendo fuertemente ovacionados. Con la muleta inició su faena por cambiados por la espalda, e intento hacerse del morito por el pitón derecho, aunque el toro era reservón y le pedía mayor mando. Cambia su procedimiento y opto por el toreo al natural encontrado aún menos posibilidades con el de Arroyo Zarco. Inexplicablemente Uriel no volvio a intentar extraerle algo por el pitón derecho y corto por lo sano dejando una media estocada desprendida.
El segundo de su lote salió avanto de toriles tan solo para estrellarse en el burladero de matadores y partirse el pitón en dos. Lo sustituyó un primer reserva de Campo Hermoso que resultó manso y tardo en sus embestidas. Nuevamente “El Zapata” accedió a poner banderillas siendo los más coreados un “par monumental” y un tercero “al violín” que provocó se regalara una vuelta al ruedo ante la algarabía de un sector de público ocasional. Con la muleta anduvo descafeinado en lo artístico, pero voluntarioso por lo que al culminar su labor con una buena estocada fue premiado con una oreja.
Lo mejor de la tarde vendría en el segundo del lote de Sebastián Castella de nombre “Barquero”, un cardeno bragado que fue el cómplice ideal del torero francés, ya que lograron en comunión regalarnos una de las mejores faenas de la temporada y sin exagerar salvar la misma después de tantas sustituciones.
Desde que salió por toriles “Barquero” fue muy fijo y humillador en el toreo de capa de Castella. Poco o nada fue su empuje en varas ya que recibió muy poco castigo. Con la muleta Castella entendió rápido al cárdeno y lo metió poco a poco en el engaño en unas series de derechazos muy largos y profundos. La segunda serie fue cercana a los ocho muletazos demostrando un temple excepcional y rematando con un molinete muy jaleado. Aquello fue una sinfonía de madurez del francés por derecha y por izquierda, adornándose con largos pases de pecho y trincherazos que hicieron vibrar a toda la plaza.
La faena estaba hecha, sin embargo cuando Castella se fue por la espada algunos pañuelos comenzaron a salir en el tendido de sombra. Castella consciente de la situación continuó toreándolo a placer aprovechando la noble y pastueña embestida de “Barquero” que en ningún momento le presentó dificultades. Se avecinaba otro indulto “a la mexicana” imponiéndose la nobleza sobre la casta y la bravura. De esta manera pudo firmar Sebastián Castella una de las mejores faenas que ha conseguido en Guadalajara tirándose a matar, sin embargo el juez de plaza el Lic. Alfredo Sahagun ordenó rápidamente el indulto de “Barquero”.
Con el primero de su lote poco pudo hacer ante la mansedumbre de su astado, condición general de casi todo el encierro.
Poco pudimos ver de Leo Valadez que tuvo una tarde sin mucho brillo debido al pésimo lote que le tocó en suerte, habrá que esperar para verle con toros que le presenten mayor posibilidad de mostrarse nuevamente el público tapatío.
Al finalizar el festejo un grupo de aficionados pudimos intercambiar algunas impresiones con el juez de plaza el Lic. Sahagún sobre el indulto de “Barquero” y al cuestionarle sus motivos para ordernar el indulto esto fue lo que expresó: “Fue un toro noble, bravo con mucha movilidad y hubiese sido una pena que una gran faena terminara en un pinchazo” lo que me hace cuestionarme, ¿fue el indulto un premio para el toro o para el torero?
Se nos olvida que en México existe la figura del arrastre lento como premio para los toros que sin ser excepcionales han tenido un destacado juego como fue el caso de “Barquero” de Arroyo Zarco.
Si bien la tarde iba en picada por el mal juego de los toros ¿Se puede justificar el otorgar un indulto para evitar que una mala estocada eche a perder una buena faena? Que no se nos olvide que el “Nuevo Progreso” de Guadalajara es considerada en el orbe taurino como la plaza más seria de México.
Queda la experiencia para la reflexión.
Es importante tambien recalcar que en Guadalajara no se otorgan trofeos simbólicos para el torero cuando se presenta un indulto al ser un premio compartido con la casa ganadera.
Una respuesta a “Guadalajara: Enorme faena de Castella premiada con el indulto.”
Si yo fui a esa corrida y era suspiro y suspiro y se me mojaron las manos de la emocion el toro fue espectacular y la autoridad no dudo ni un momento indultar, se lo merece y que viva teniendo descendencia.