
Tras una histórica temporada en Europa llena de gestas, mucha testosterona así como de proezas técnicas y estéticas, regresa este fin de semana a México Andrés Roca Rey. La figura del momento que lleva más gente que nadie a las plazas en España, Francia y Sudamerica. Un torero que sin duda está marcando una época. De otro modo, no tendría sentido referirse a su regreso como lo que es, un verdadero acontecimiento.
Por Luis Cuesta – De SOL y SOMBRA.
Todas las épocas en el toreo han tenido un ídolo o un torero que mande con firmeza en cualquier plaza donde se presente y ante cualquier despacho. Andrés Roca Rey actualmente representa ese ídolo que parece estar dispuesto a llevar a la tauromaquia hacia la modernidad, que arrasa en las taquillas, conmociona a los públicos y que se ha ganado el respeto de los mas aficionados mas exigentes.
Al verlo enfundado en un traje de luces, todos los aficionados sienten un ambiente de epopeya por esa mirada fría, fija y por la firmeza con la que se pone frente a los toros. Recientemente, tras su paso por la feria de Bilbao un periodista le preguntó: “¿Tiene usted miedo a morir? a lo que le contestó: “Bueno, uno siempre tiene miedo a lo desconocido, pero hay veces que por un sueño también tienes que estar dispuesto a perderlo todo en un momento dado y es ahi cuando uno se abandona por completo en todos los sentidos”. Ese es el sentir de un torero moderno que vive su tauromaquia entre lo clásico y heterodoxo.
Su poder no solo asusta los aficionados, sino también a sus alternantes cómo pude observar en sus ultimas actuaciones en México, en donde ha salido a por todas, echando toda la carne en el asador para ganarles la partida a todos sus alternantes. De hecho, demasiada carne echó en sus ultimas actuaciones, pues sus compañeros no tuvieron capacidad de respuesta. ¿Qué especie de vendaval es éste? Se miraban entre ellos desconcertados mientras Roca hacia pasar al toro por terrenos imposibles, con qué fuerza de la naturaleza, frenesí desbordado y mar embravecido nos vinieron a poner nuestros apoderados pensarían. Y, agotados, algunos renunciaban a pelearle las palmas.
Pero como siempre pasa con esta elite de toreros, muchas circunstancias circulan alrededor de su regreso y tambien algunas dudas. Una de ellas será conocer si Roca Rey podrá conseguir el nivel de heroicidad y de épica en sus futuros compromisos en México para alcanzar el nivel de ídolo que ha conseguido en Europa.
Esa es quizás la gran duda que ronda por la mente de muchos aficionados, porque aunque en nuestro país ha conseguido tardes importantes, no ha terminado por convertirse en ese ídolo del toreo o en ese volcán que arrasa en todas las taquillas en donde se le anuncia, y que es fundamental para llegar al siguiente nivel que ha intentado conseguir en los últimos años en México. Los grandes figuras del toreo extranjeras como Ponce, Juli, José Tomás y Pablo Hermoso de Mendoza que han alcanzado el nivel de ídolos en nuestro país, si han conseguido abarrotar -en su mejor momento- todas las plazas de toros, incluida la Plaza México.

Este fin de semana RR tendrá dos inmejorables oportunidades para demostrar en Aguascalientes y Guadalajara su fuerza no solamente en el ruedo, sino también en las taquillas. Así que no comenzemos a poner desde ahora pegas sobre su poder de convocatoria para ambos festejos, aduciendo que por el incremento en el precio de las entradas, pueda llegar a ser un factor para que no se registren llenos o grandes entradas en ambas plazas.
Los toros en realidad nunca han sido un espectáculo demasiado accesible, pero cuando ha existido un interés de verdad por ver a una figura del toreo del nivel RR, los aficionados hacen hasta lo imposible por conseguir una entrada. Así ha sido siempre desde la época del Cordobés -para no irnos mas atrás en el tiempo- hasta la del Juli.
Sus alternantes el próximo sábado en su primera presentación, serán los diestros locales Joselito Adame y Leo Valadez, ambos recién llegados de una temporada Europea con algunos éxitos importantes en distintas plazas. Adame en su tierra suele ser un cañón y estoy seguro que en esta ocasión aprovechará la oportunidad para tratar de abollarle la corona al rey ante su afición.
Leo Valadez por su parte no solo tendrá que vérselas con dos importantes figuras del toreo, sino que ademas tendrá que luchar contra su propio destino en el otoño/invierno que deberá servirle para consagrarse como figura del toreo en México, porque si no es ahora ¿cuando? Aptitudes, sitio, y valor tiene de sobra, así como varios años en la sala de espera para que su carrera alcanzará este momento tan crucial. En sus manos esta su futuro, pero oportunidades para conseguirlo créanme que no le van a faltar. Los toros serán del hierro de Fernando de la Mora.

Para la segunda tarde de Roca Rey en Guadalajara, están anunciados Octavio García “El Payo” y Hector Gutiérrez, el gran triunfador de la pasada temporada del Nuevo Progreso. “El Payo” seguramente saldrá con todas las ganas del mundo para demostrar su vigencia, sitio e importancia en el escalafón mexicano. Será una tarde de pronostico reservado para el querétano ante la rocarización que seguramente habrá en el tendido, pero si logra templarle las embestidas a sus astados, consigue centrarse y dibujar el torero como él lo siente, puede formar un lío. El Payo tiene la onza, esperemos que también tenga las ideas claras y se mantenga fiel a su concepto.
Hector Gutiérrez llegó la temporada pasada a tomar la alternativa en Guadalajara sin grandes reflectores y obtuvo uno de los triunfos más importantes del año, saliendo en volandas del Nuevo Progreso y culminado una tarde soñada por todos los toreros. Torero de temple, trazo largo en sus muletazos y correcto estilo, buscará nuevamente dar un golpe en la mesa que lo consolide en los primeros lugares del escalafón. Los toros serán de Jaral de Peñas, un hierro con el que Roca Rey ha tenido grandes triunfos en territorio mexicano.
Es lo que digo yo.
Twitter @LuisCuesta_

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Una respuesta a “Es lo que digo yo: El Retorno del Rey.”
Hoy por hoy el unico Diestro que puede llenar las Plazas en todo el orbe Taurino