Por Borja Ilián.
El rejoneador Emiliano Gamero y el torero a pie, Uriel Moreno “El Zapata” cortaron una oreja cada uno en la tercera corrida de la Feria ¡Sí a los Toros! en Texcoco, en el Estado de México. En cambio, el tercer espada, Juan Pablo Sánchez, no logró trofeo alguno.
Los toros de Chinampas fueron justos de presentación, descastados y endebles, salvo los nobles cuarto y quinto.
En la plaza de toros se registró tres cuartos de entrada flojos. Pero la noticia relevante de la tercera de feria estuvo en el callejón y no en el ruedo.
Tras las tablas, el propietario de la empresa taurina Don Bull, gestora del coso de Texcoco, anunció los cuatro toreros mexicanos que estarán en la Feria de San Isidro de Madrid 2023.
Pedro Haces, socio además de la madrileña plaza de Las Ventas, confirmó que Arturo Saldívar, Octavio García El Payo, Leo Valadez e Isaac Fonseca harán el paseíllo en la capital de España.
Sin duda dará de qué hablar esta selección sorprendente para muchos aficionados por la presencia de Saldívar y El Payo, dos diestros actualmente en horas bajas, sin méritos acumulados para semejante oportunidad.
Mientras que en el albero de la Silverio Pérez no hubo grandes sorpresas, ante unos decepcionantes astados de Chinampas, de embestida mortecina y al ralentí con los que los tres matadores pusieron lo esperado de su parte. Por destacar algo, mencionar la versión más purista que se le recuerda a El Zapata.

En su primer toro, de embestida abrupta, el toreo abigarrado de Uriel Moreno, que estuvó más contenido de lo habitual, logró ejecutar media docena de pases sin asomarse al pitón contrario, pero con mando y sentido.
Una estocada trasera y contraria resultó letal. El juez de plaza le dio una oreja de premio. Tuvo la puerta grande “El Zapata” con el noblete quinto. Falto de trapío perdió las manos traseras y se desplazó sin tensión en su quehacer frente a los engaños.
El veterano de luces realizó un quite por chicuelinas y sus socorridas banderillas tres en uno. Luego en el tercio de muleta citó con la tela atrasada, muy en paralelo y bailando entre las tandas de muletazos. Los pinchazos con la espada impidieron al “Zapata” recaudar algún trofeo del palco.
La otra oreja la obtuvo el caballero Emiliano Gamero que enfrentó a dos toros de mucho peso y suficiente fijeza y docilidad para dejarse hacer en la lidia ecuestre.
El que partió plaza se mantenía fijo, pero sin codicia. Trotando alrededor del jinete que también dio sus vueltas en torno al toro mientras interpretaba para los tendidos.
Gamero montó sin apreturas, pero con algunos percances entre rejoneador y caballo provocaron una caída y apuros al torero. El toro tras varios intentos con el rejón de muerte, dobló.
Su trofeo con el cuarto fue protestado por parte de los presentes. El noble astado seguía la montura sin apretar. Gamero estuvo eficiente con los castigos y vistoso en desplantes y algún par, pero nunca ajustado.
De nuevo sus deficiencias técnicas motivaron una espectacular caída y un susto para el caballo al ser izado por el cornúpeta. Falló con los aceros y necesitó de varios intentos para finiquitar al toro.
A pesar de ello, tuvo en sus manos una extremidad auditiva del noblote cortesía del juez de plaza. Hubo pitos al palco.
No tuvo suerte el tercer espada, el mexicano Juan Pablo Sánchez. El sorteo le deparó dos inválidos con los que nada pudo hacer.
El espectáculo de los Forcados Amadores ofreció un par de pegas a la primera y destacaron unas banderillas de Heidegger Chávez y una vara de Ricardo Gaytán.
Publicado en Swissinfo
