Por Borja Ilián
La cuarta corrida de la feria mexicana “¡Sí a los toros!” se realiza este sábado en Texcoco, en el Estado de México, a 37 kilómetros de la capital mexicana, con un cartel compuesto por un mano a mano entre los mexicanos Octavio García “El Payo”, uno de los cuatro espadas mexicanos seleccionados para torear en la próxima feria de San Isidro de Madrid, y Sergio Flores.
Los espadas lidiarán reses del hierro de Xajay. Sigue el ciclo taurino auspiciado por la empresa Don Bull del promotor taurino y líder sindical Pedro Haces.
Una vez frenada la incontinencia del juez de plaza a la hora de dar trofeos, esta cuarta corrida está marcada por la incógnita sobre el juego de los astados y la presencia de “El Payo”.
El matador mexicano, tras 15 años de alternativa, fue seleccionado para San Isidro en una decisión muy discutida, porque en la opinión de algunos aficionados, se quedaron fuera toreros actualmente más importantes que Octavio García.
El hecho de que Pedro Haces sea actual socio gestor de la madrileña plaza de toros de Las Ventas, aumenta la presión sobre “El Payo” en el albero de la plaza Silverio Pérez de Texcoco.
El otro foco informativo será el ganado de Xajay. Los tres festejos anteriores de “¡Sí a los toros!” mostraron reses endebles.
Si bien los toros de la primera corrida, de la divisa de José Arroyo, tenían un comportamiento de bravura y casta, su paso por el ruedo era cansino.
Los descastados de la segunda y tercera, de los hierros Vistahermosa y Chinampas, eran de gran endeblez y algunos inválidos.
La ganadería de Xajay ha dejado varias veces muestras de casta y mucha movilidad. Sin embargo en las últimas temporadas esta ganadería regentada por el arquitecto Javier Sordo Madaleno ha ido ganando tamaño y perdiendo bravura.
Además de “El Payo” y los toros de Xajay el otro protagonista es el matador del estado de Tlaxcala, Sergio Flores.
El torero, que como novillero gustó tanto en plazas como Las Ventas y tras su alternativa dejó corridas estelares, justamente a un toro de Xajay llamado Gibraltar le realizó una faena de gran pureza y valor en la Plaza México de la Ciudad de México en 2015.
Ha ido diluyendo su sitio en la cara de los astados y ofreciendo una tauromaquia de gestos y bailes pero sin quietud alguna. La juventud de Flores y lo que mostró en los ruedos hace no tanto permite mantener alguna esperanza de un cambio de rumbo en su toreo.
La corrida empezará a las 17.00 horas
Publicado en La Vanguardia

