Le pidieron con fuerza las dos orejas, pero el presidente dejó todo en una, idéntico premio que Armendáriz, en una entretenida corrida de rejones.
Por Rosario Pérez.
«¡Un torero con bigote, un torero con bigote!», se escuchaba en el tendido. A lomos de Ferrera, un caballo castaño y lusitano, apareció un torero a la mexicana y con un mostacho que sorprendió a los aficionados que se dieron cita. Pocos, pero miles, que no está mal para un domingo de agosto a las siete de la tarde y con la piedra de la sombra a 30 grados. Aires de galán cuarentón de telenovela traía Emiliano Gamero, que paró a mano derecha al toro de su confirmación, con más puntas que lo que se acostumbra en las funciones de rejoneo. Lo templó sin aspavientos el azteca, aunque sin grandes ceñimientos. «¡Vamos ahí, gente bonita!», gritó al tendido 2 cuando apareció sobre Casanova, con una torera curvatura. Qué elástico era, como se vio en el apunte a dos pistas y en esa pirueta en la cara de Valiente. Cuando citó al pitón contrario, apenas le dio tiempo a salir de la reunión y le pegó en la bragá. Más elevación traía Jaguar, con el que clavó a la grupa mientras el áspero animal de Benítez Cubero, que ya había dado su espectáculo, se aquerenció en chiqueros. Una belleza negra y azteca, aunque con una cara de matices árabes, apareció después. Hizo guiños a la galería con elevadas y un violín con una banderilla larga… Lejos, muy lejos… Una rosa de larguito tallo puso el broche a la animosa faena de su confirmación en Las Ventas. A Pedro Haces, acompañado de Juan José Padilla, brindó la muerte del toro. No fue el más bello de los rejonazos, tan traserísimo, pero el animal dobló. Saludó por su cuenta tras tibias palmas.
El confirmante Emiliano Gamero
El confirmante Emiliano Gamero PLAZA 1
Portugués era el otro confirmante, Paco Velasquez, un torero que decidió cambiar por monturas. Fallón con el rejón de castigo a un toro que metía la cara en las telas del auxiliador, aunque se paró enseguida. Con Bambú intentó un quiebro que empezaba en Manuel Becerra y acababa en el Metro Carmen. Para citar luego con más acierto al pitón contrario. No era fácil con el tal Llevador tan apalancado. La emoción llegó sobre Chalana en un meritorio par. Tras otro a dos manos, enterró un rejonazo. Dio una vuelta al ruedo. Eran las ocho y un minuto. Una hora, dos toros.
Qué bien paró José Miguel Callejón a lomos de Riofrío al tercero, de menor trapío, pero con tremenda movilidad en las telas. Siguió mostrando sus ganas sobre Chano Cantor, con unos sorprendentes protectores verdes. Poco transmitía Travieso, con su crines sueltas, con el que calvó al violín y cuarteando. Un minicarrusel de cortas con Cubano epilogó su deseosa labor antes de la desacertada hora final.
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Fina la estampa de Cohíba, con el que clavó la banderola a Medianoche, un llamativo berrendo en negro. Fenomenal un quiebro sobre Capea y el toreo a dos pistas, pero la siguiente banderilla cayó malamente. Lástima, porque las intenciones eran buenas. Un volatín se pegó el toro en el capote del auxiliador. Más aparatoso era Rubí: se le notaba su sangre hannoveriana. Le quitó la cabezada, a lo Ventura (pero sin poner nada a dos manos). Toreando a la mano izquierda antes de la banderilla. Y luego a dos pistas. La mejor actuación de lo que llevábamos de tarde. Dos cortas y la suerte del teléfono pusieron el broche a su entonada obra. Aguantó tanto el presidente, que cuando sacó el pañuelo blanco ya habían arrancado las mulillas el arrastre. Del caballero navarro fue la primera oreja.
Dispuesta la faena de Iván Magro, que transmitió con el buen quinto. Con la gente a favor de obra, se ciñó en el carrusel de cortas sobre un bayo que hizo algún guiño a la galería. Pinchó y perdió el posible premio, pero se marcó una vuelta al ruedo por su cuenta.
Soltero se llamaba el sexto, con el que Andrés Romero toreó a dos pistas con alegría y toreó sombrero en mano a lomos de Fuente Rey. Fenomenalmente clavó un par en los mismísimos medios. Al pitón contrario. Se adornó con elevadas y puso otro banderilla sobresaliente. Después de lo visto anteriormente, su faena se agigantaba. Con Farrugia animó el cotarro con mucha fibra. Llamaba la atención del toro con un saludo y clavó en corto otra más. Citando a Soltero hacia atrás, puso ahora uno al estribo. Con mucha transmisión en el tendido, ya con la noche encima. Tocaba la hora final con Chamán: contrario pero efectivo cayó el rejón. Con atronadora fuerza le pidieron las dos orejas, aunque el presidente dejó la cosa en una. Suya fue la actuación más sólida, la faena más luminosa bajo la noche madrileña.
LAS VENTAS
Monumental de las Ventas. Domingo, 20 de agosto de 2023. Menos de un cuarto de entrada. Toros de Benítez Cubero, correctos de presencia y colaboradores en conjunto, aunque hubo alguno más bronco y otro más parado.
Emiliano Gamero, rejón trasero y contrario (saludos).
Paco Velasquez, rejón (leve petición y vuelta al ruedo).
José Miguel Callejón, rejón defectuoso, pinchazo y rejón contrario (saludos).
Roberto Armendáriz, rejón contrario atravesado y descabello (oreja).
Iván Magro, pinchazo, rejón trasero y descabello. Aviso (vuelta al ruedo por su cuenta).
Andrés Romero, rejón contrario (oreja con fuerte petición de otra).
Publicado en ABC