El público acudió a la plaza a la espera de se produjera algún acontecimiento realmente importante y, por fin, se consiguió con una actuación redonda de El Juli que repitió triunfo y de los grandes cortando dos orejas del mejor toro de la corrida de El Pilar y perdiendo otra por pinchar. Juan José Padilla volvió a Bilbao entre tanto cariño como cuando actuó en junio pero no tuvo suerte. Alejandro Talavante cerró la tarde con una valiente faena y cortó una oreja.
Por José Antonio del Moral
Los bilbaínos volvieron a ovacionar a Padilla tras el paseíllo y con más fuerza al salirse para fuera por verónicas con el primer toro que se derrumbó al tomar el primer puyazo y fue devuelto de inmediato. Como parte del público protestó el escaso trapío del que salió después, Padilla le pegó tres largas de rodillas y el animal también acusó falta de fuerza en los remos, cubriéndose de trámite la suerte de varas. Padilla encantó en un vulgar tercio de banderillas y a casi nadie importó que el noblote animal amagara varias veces con doblar las manos en su faena de muleta que transcurrió de mayor a menor acople. Los que estaban ya con el pañuelo en la mano, se lo tuvieron que guardar porque Padilla falló con la espada.
El gigantesco sobrero lidiado en cuarto lugar no dio tantas facilidades y Padilla hizo lo que mala o buenamente pudo en banderillas. Tercio que cubrió animado por el público que no por propia voluntad. El toro llegó muy remiso a la muleta y, aunque fue noble, no permitió ligar su faena empeñosa al jerezano que lo pasó mal a la hora de matar.
El infalible Juli lanceó como le dio la gana al muy noble segundo toro. Magnífico el quite alternando chicuelinas y verónicas con tafalleras por bajo. Réplica menor de Talavante en el suyo por chicuelinas. Y una soberanísima gran faena sobre ambas manos – excelente al natural – en la que El Juli se adueñó totalmente del toro y de la situación, cortando dos merecidas orejas tras el estoconazo con que mató. Fue la faena que tanto esperaba cuajar El Juli en esta plaza. Una faena redonda, ancha y larga. Templadísima y ligadísima sin solución de continuidad. Esta vez no pudo resistirse el palco y la gente suspiró feliz cuando el presidente sacó el segundo pañuelo.
El Juli aprovechó con el capote todas las embestidas que tuvo el hermoso colorao quinto, tanto en su largo saludo como en un templadísimo quite por verónicas. También muy noble aunque con menos pujanza y brío que su anterior oponente, El Juli se lo llevó a los medios y, aunque tuvo que tirar del toro en cada pase porque no se venía solo, logró llevarlo una y otra vez bajo su mando en un alarde de sometimiento. Faena menos ligada que la anterior, pero más importante por meritoria que, lamentablemente, quedó sin premio por pinchar El Juli antes de dejar una estocada que fue suficiente.
El tercer toro pareció meter la cara desde que salió y Alejandro Talavante lo dejó todo para la muleta. Claro que, tras lo hecho por El Juli, iba a ser muy difícil de igualar y más de superar. Además el burel no fue tan bueno por venido abajo nada más empezar el trasteo Talavante con los originales pases cambiados que prodiga en exceso y que no siempre son convenientes. Hay toros a los que no de bebe obligar sino ayudar.
Con el cuajadísimo sexto Talavante no pudo lucirse con el capote. Pero sí echarle mucho valor en la faena pese a no lograr templarse del todo ni hacerse por completo con el toro. La emoción primó y prendió en el público que pidió y consiguió una oreja para el extremeño tras matar de estoconazo algo caído.
Ficha del Festejo
Bilbao. Plaza de Vista Alegre. Jueves 23 de agosto de 2012. Tarde fresca y nublada con rachas de viento y tres cuartos de entrada. Seis toros de El Pilar incluido el sobrero que, tras correr turno por devolución del inválido primero, se lidió en cuarto lugar. Bien aunque desigualmente presentados y de vario juego. Noble aunque con poca fuerza el primero. Extraordinario el segundo. Pronto venido a menos el tercero. Deslucido el sobrero que hizo cuarto. Noble pero muy remiso el quinto. Manejable sin clase el sexto. Juan José Padilla (teja y oro): Dos pinchazos y estocada, silencio. Dos pinchazos y estocada, silencio. El Juli (nazareno y azabache): Estoconazo trasero, dos orejas. Pinchazo y estocada, leve petición y gran ovación. Salió a hombros. Alejandro Talavante (blanco y plata): Dos pinchazos y estocada, saludos. Estocada entera algo caída, oreja.