Es lo que digo yo: Una tercia de novilleros que despierta ilusiones.

Por Luis Cuesta – De SOL y SOMBRA.

Tres vocaciones en las que tesón, valor, profundidad, elegancia y pundonor adornan tres formas diferentes de entender y hacer el toreo. Algo que será una auténtico lujo para el aficionado, si existe la posibilidad de verlos competir con nobleza este domingo en el Nuevo Progreso de Guadalajara.

Después de su primera experiencia ante los públicos españoles, Hector Gutiérrez pasó de ser un perfecto desconocido a alguien ubicado en España en las filas novilleriles. Después de ese primer contacto, Gutiérrez se ha forjado una imagen de novillero de finas maneras y con un profundo amor propio que le ha llevado a cuajar tardes importantes en esta temporada 2019 en ambos continentes. En el umbral de la alternativa, este joven novillero hidrocálido ahora tendrá que reafirmar nuevamente sus buenas condiciones ante un público expectante por verle y demostrar que está listo para alcanzar la borla de matador de toros el próximo año con todos los honores.

Fuertes vivencias novilleriles son las que se ha traído Diego San Román de España, en donde ha tenido una campaña con mucho éxito que lo ha convertido en uno de los novilleros mas destacados de la temporada. Pero trofeos al margen, lo que más puede valorar el novillero de Querétaro es la impresión que como torero cuajado ha dejado plantada en cada una de sus actuaciones. El inmenso valor que posee le hizo pisar un sitio nada fácil con el novillo español y este domingo se presentará con un ambiente de mucha expectación ante la afición más seria y dura del país, que seguramente lo examinará con lupa.

El más joven de la tercia, Miguel Aguilar, se forjó una temporada en España cuajada y cimentada en el toreo de arte y sentimiento, pero aderezado con una fuerte dosis de valor. Hace unas semanas regreso a su país en donde se presentó en la Plaza Mexico dejando una muy grata impresión, especialmente en su segunda actuación, en donde se impuso con mucha garra y oficio a un lote variado y con complicaciones de Villar de Águila para llevarse una oreja de mucho peso. La segunda que ha cortado en la presente Temporada Chica de la Plaza México.

Sin hacer mucho ruido, Miguel Aguilar ha demostrado tarde a tarde una capacidad importante para asimilar, corregir errores y sobre todo para pensar frente al novillo.

Con todos estos antecedentes podemos decir que la tercia ya está forjada y que la afición mexicana presume ya de dividirse como seguidores de San Román, Gutiérrez y Aguilar.

Y ante lo inevitable, los sueños quedarán atrás y con ello llegará la cruda realidad para esta tercia el próximo domingo 6 de octubre en El Nuevo Progreso, en donde estoquearán un encierro de San Martín propiedad de Don Alberto Baillères.

Hay grandes expectativas para este domingo en Guadalajara, pero tampoco hay que olvidar que finalmente son novilleros y así hay que verles. Alguno estará más avanzado que el otro, y ese otro acusará algunos errores que con el tiempo -y la dedicación- se podrán ir corrigiendo, pero lo que no se tolerará nunca en un novillero será la falta de actitud. Eso es lo primero que la conocedora afición tapatía les exigirá y en ellos estará mantener en sus próximas tardes, el nivel de expectación e ilusión que hasta este momento han despertado.

La apuesta es sin duda fuerte para la empresa, apoderados y sobretodo para los mismos novilleros. Que haya mucha suerte para todos.

Es lo que digo yo.

Twitter @LuisCuesta_